Cada segundo que pasa en mi mente, lo dedica mi alma a pensar en ti, porque tú no sabes lo que es quererte sin tener tu amor muy cerca de mí. Mi corazón late deprisa al verte, pues no puedo dejar de quererte. Mis venas explotan cuando te sienten, mi sangre hierve al pronunciar tu nombre. Todo el día pienso en ti, sin parada ¿Será obsesión?, o ¿estoy enamorada? Robaste mis noches y hasta mis días; quiero libertad en las noches frías...